Ciclo “A salvo: diálogos de refugiados”

Cálculos moderados nos recuerdan que 51 millones de personas han debido buscar refugio fuera de sus países de origen. Amenazadas, perseguidas, a menudo “castigadas” por motivos muy diversos, ninguno de ellos delictivo para el Derecho Internacional, sobreviven en tierra extraña (o en tierra de nadie), expuestas a la precariedad del presente y a la incertidumbre sobre su futuro.

El blindaje político y policial de los países europeos ante la marea migratoria deja a los solicitantes de asilo –gente que necesita ponerse a salvo de peligros muy concretos– en una grave situación de vulnerabilidad e indefensión, cuando no en un limbo legal, social, laboral y existencial.

Por desgracia, las grandes cifras de las catástrofes humanitarias no son capaces de suscitar una empatía solidaria y activa en la ciudadanía de los países respetuosos, en mayor o menor grado, de los Derechos Humanos. Los números no tienen rostro. Por ello, la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), entre sus 32 “Propuestas para reforzar la protección de las personas refugiadas en España” del año 2014, apela al desarrollo de campañas de información y sensibilización sobre las personas refugiadas y su singularidad, a fin de erradicar los prejuicios xenófobos y racistas y de fomentar los valores de hospitalidad, solidaridad y respeto a los derechos humanos.

Se trata de vincular a cada una de estas personas (víctimas de la violencia de género, estigmatizadas por una opción sexual “diferente”, perseguidas por su compromiso político o amenazadas por una labor periodística “inconveniente”) con otros tantos autores que transformen su experiencia en un texto dramático.

¿Puede el teatro dar cuenta fiel de un fragmento hiriente de la realidad a través de propuestas comprometidas también con lo artístico? Los textos generados por el proyecto “A salvo-Diálogos de refugiados” serán llevados a la escena por un equipo de realizadores vinculados al NTF en un formato teatral similar en toda la serie; tras la representación, tendrá lugar un debate con el equipo artístico conducido por una personalidad comprometida con la defensa de los Derechos. Cuando sus circunstancias personales lo permitan, el propio refugiado también estará presente.