Derechos laborales y protección del planeta. ¿El trabajo dignifica?

Trabajar no es sinónimo de vivir sin pobreza. Según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), 780 millones de mujeres y hombres trabajadores no ganan lo suficiente para superar el umbral de la pobreza de dos dólares al día. En España, el 13% de la población trabajadora vive por debajo del umbral de la pobreza. Tanto en el mundo como en España quien se lleva la peor parte son las mujeres que soportan las peores condiciones de empleo y los salarios más bajos. Esta situación es especialmente precaria en el caso de las mujeres migrantes, racializadas o en una situación legal irregular.

La OIT estima que, de aquí a 2030, deben crearse 600 millones de nuevos empleos al año. La cuestión reside en definir qué tipo de trabajo debe ser creado y en qué condiciones. No basta con crear empleo; debe ser decente. Esto significa garantizar ingresos justos, seguridad en el lugar de trabajo y protección social para las familias, libertad para que las personas expresen sus opiniones, se organicen y participen en las decisiones que afectan sus vidas; significa igualdad de condiciones y trato para mujeres y hombres.

La creación de empleos de calidad sigue siendo un gran desafío para casi todos los países. También lo es apostar por una economía que proteja el medioambiente y reduzca las emisiones de carbono. Existen propuestas que encaran estos desafíos y demuestran que es posible el diálogo entre empresarios, Gobiernos, sindicatos y trabajadores para garantizar tanto el trabajo decente como la protección del planeta.

Intervienen

• Montserrat Mir, asesora especial, Centro por la Transición Justa (Just Transition Centre).
• Carolina Elías, presidenta de SEDOAC (Servicio Doméstico Activo), Coordinadora Centro de Empoderamiento de Trabajadoras de Hogar y Cuidados (CETHYC).

Modera: Daniel Domínguez, periodista, coordinador de #yoIBEXtigo, de La Marea.

Coordina: Coordinadora de Organizaciones de Cooperación para el Desarrollo.