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Abrir puertas y ventanas, de Milagros Mumenthaler

17 nov 2012
En Buenos Aires, a finales del verano y tras la muerte de la abuela que las ha criado, Marina, Sofía y Violeta viven solas en la casa familiar.
Duración: 1 hora 30 minutos

Abrir puertas y ventanas, de Milagros Mumenthaler. Argentina/Suiza, 2011. 98 min.

En Buenos Aires, a finales del verano y tras la muerte de la abuela que las ha criado, Marina, Sofía y Violeta viven solas en la casa familiar. Intentando llenar esa ausencia, cada una a su manera. Marina se consagra en sus estudios y cuida además de la casa, mientras Sofía se concentra en su apariencia personal y las salidas con los amigos. Violeta, en cambio, se pasea de la sala al cuarto y recibe de vez en cuando, la visita de un hombre de más edad.
Desacuerdos, bromas, mezquindades y gestos de afecto presiden este período de incertidumbre y transición, hasta ese día de otoño en que Violeta desaparece sin decir palabra.

La directora, Milagros Mumenthaler (Córdoba, Argentina, 1977) creció en Suiza y años más tarde regresó a Buenos Aires para estudiar en la Universidad del Cine. Ha dirigido cuatro cortometrajes (¿Cuándo llega papá?, en 2000; Cape Cod, en 2003; El patio, en 2004; y Amancay, en 2007) y Abrir puertas y ventanas, es su primer largometraje, por el que obtuvo el Leopardo de Oro a la mejor película en el Festival de Locarno de 2011.

“Me interesa el tema de las relaciones fraternales, el lugar y la situación de la ausencia. Son los temas que venía trabajando un poco en mis cortos. Tenía la necesidad de explayar un poco más esos temas en un largometraje. Ese fue el punto de partida. Las relaciones fraternales siempre me interesan, me movilizan. En general todas las relaciones familiares que son impuestas. Uno no las decide. Es como cargar con esa cosa de la que uno no se puede desprender, un espacio en donde se generan muchas tensiones y al mismo tiempo amor. Una complejidad bastante grande. Y eso siempre me interesó mucho, sobre todo cuando uno tiene hermanos y aparecen roles que vas ocupando en la casa. Y cómo influye el rol que ocupa tu hermano en el rol que podés ocupar vos. No hay el mismo espacio para todo el mundo, de alguna manera. Es un juego en donde cada uno va ocupando su lugar para poder ser.”

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Abrir puertas y ventanas, de Milagros Mumenthaler

17 nov 19 - 20:30 h