En el huerto de la terraza de La Casa Encendida no tiramos nada porque... ¿por qué no hacer compost con los restos orgánicos que tenemos? ¿Los restos de poda? ¿Las hojas secas? Con la ayuda de la pequeña fauna y distintos microorganismos del suelo, nuestros restos del jardín vuelven a incorporarse al mismo, realizando una y otra vez el ciclo de la materia orgánica.
El jardín en terraza de La Casa Encendida constituye un buen ejemplo de cómo caminar hacia la sostenibilidad en la gestión y mantenimiento de un espacio verde.
En esta actividad escolar hablaremos del compostaje, el proceso por el cual aprovechamos los restos orgánicos de nuestro huerto y jardín con la ayuda de la microfauna del suelo. Compostando los restos vegetales conseguimos varios objetivos: gestionar los residuos que genera dicho espacio ajardinado, reutilizar este compost como fuente de nutrientes en el jardín y también, por tanto, reducir la demanda de otros abonos más costosos o innecesarios.
Equipados de nuestra lupa y claves de identificación, descubriremos los organismos que nos ayudan en el proceso (lombrices de tierra, insectos, pequeños arácnidos y otros invertebrados) para aprender la importancia de su labor en la transformación de nuestros desechos orgánicos.
Objetivos
- Conocer qué es el compost, cómo se forma y cuáles son las ventajas de aprovechar este proceso natural.
- Reconocer las labores cotidianas que generan residuos vegetales y cuáles de estos podemos compostar.
- Identificar distintos animales aliados en la labor del compostaje: los habitantes del suelo. Pequeños invertebrados que trataremos de capturar (solo temporalmente) para su observación a través de lupas digitales e identificación con claves de invertebrados.
Dirigido a: grupos escolares de 3.º a 6.º de Primaria.
Plazas: 30 participantes (máximo 2 sillas de ruedas).
Duración: 1 hora y 30 minutos.
Formato: presencial en La Casa Encendida.